Fuente: KOAXMAGAZINE – Febrero 2020
Seguramente tengas familiares que después de una pelea ya no se hablan, compañeros de trabajo que, debido a discrepancias, no se saludan, jefes abusones en función de su posición, parejas con infidelidades o amigos que se han traicionado… Por lo que te preguntarás, ¿qué es el poder del perdón?
Bien es cierto que la experiencia de haber hecho daño o haber sido ofendido es universal. Todos nosotros hemos sido tanto víctimas como verdugos, al igual que hemos sufrido rencor, la venganza, la ansiedad o la culpabilidad a raíz de ese daño. Es por ello que, el antídoto para salir de estos estados, es el poder del PERDÓN.
Asimismo, perdonar NO significa olvidar, como tampoco aprobar ni justificar algún tipo de ofensa o absolver a una persona de su responsabilidad. Debes saber además que perdonar no es un reflejo de debilidad ni de sumisión, ya que algunas personas erróneamente lo creen así.
¿Qué es el poder del perdón?
El perdón es un acto de valentía y de determinación. Este nos permite conmutar resentimientos en forma de libertades, recordando sin odiar, eliminando el rencor y los deseos que surgen de la venganza.
Asimismo, este se compone de cuatro componentes:
- La aceptación en función del daño que nos han provocado.
- El descenso del deseo de buscar venganza o algún tipo de compensación.
- Deseo de acercamiento o evasión de la otra persona.
- Cambios en el comportamiento y sentimientos negativos hacia otra persona.
Beneficios del poder del perdón sobre la salud y las relaciones
Existen múltiples beneficios del poder del perdón sobre la salud, tales como:
- Se reduce la ansiedad, depresión y hostilidad.
- Mejora la prevención de problemas del corazón disminuyendo así la presión arterial.
- Mejora la calidad del sueño.
- Se obtiene un sistema inmunitario mucho más fuerte.
- La inteligencia emocional se ve fortalecida.
- Mejora la gestión de los conflictos interpersonales.
- Se generan relaciones con mayor calidad y compromiso.
Claves para mejorar su disposición
Cabe comentar que no siempre estamos dispuestos o capacitados para perdonar a otra persona. A continuación, como coach personal, os daré 4 claves para mejorar la disposición al perdón y aprender así a sanar las heridas causadas por el pasado.
- El perdón es para quien lo concede, no para quien lo recibe. De esta forma, debemos cambiar el pensamiento de que perdonar es igual a minimizar la ofensa o permitir que quien nos hirió se salga con la suya. Por ello, el poder del perdón es para nuestro propio beneficio.
- Hay que perdonar, porque la herida que sufrimos pudo haber sido causada por nosotros en otras circunstancias. La clave de todo ello es la empatía, es decir, ponernos en el lugar de la otra persona. En estos momentos te propongo el ejercicio del diálogo de la silla vacía. Esta técnica consiste en sentarse frente a una silla totalmente vacía y vaciarnos (valga la redundancia) emocionalmente como si en ella estuviera sentada la persona que previamente nos ofendió. Tras hacerle todas las preguntas que consideremos, pasaremos a ocupar esa misma silla para que nosotros mismos demos respuesta a las preguntas.
- Calmar la reacción de lucha o huida. De vez en cuando los sentimientos de dolor y trauma vuelven a nosotros y es por ello que entramos en el modo lucha o huida y nos enganchamos fielmente al pasado. Para resolver esto, las prácticas como la respiración profunda, meditación, o practicar mindfulness nos harán volver al “aquí y ahora”, que es el único lugar en el que tenemos el poder absoluto.
- Tiempo al tiempo. El poder del perdón lleva su tiempo. En ocasiones, hay que tomarse un cierto tiempo para que las heridas sanen totalmente. De la misma forma, no se trata de obsesionarse con el perdón ni con la venganza. En cambio, se trata de liberarnos de la carga mental y emocional propia.
El perdón en nosotros mismos
Son muchas las ocasiones donde nos ponemos en unos niveles de auto exigencia imposibles de cumplir y, por si fuera poco, nos castigamos por ello. En este caso el poder del perdón y la autocompasión son unas excelentes herramientas que nos ayudarán a superar con creces los sentimientos de impotencia y recuperar un estado de normalidad y aceptación.
Y por supuesto, es fundamental que nos cuidemos mucho, ya que cuando tú estás bien, todo está bien.